jueves, 19 de septiembre de 2013

Etapa VII



Split-Zagreb

Desayunamos en un local del centro histórico de Split, con calma y sentados en una bella terraza admiramos de nuevo los antiguos edificios de la ciudad, y al terminar salimos a caminar por sus calles, sus mercados y plazas. Pasamos por el hotel a recoger las maletas y seguimos camino al Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, nuestro primer objetivo de este día, por el camino paramos en Knin a comer cordero a las brasas y sin perder mucho tiempo continuamos hasta llegar al parque. Un parque natural hermoso, con muy poca intervención en toda su extensión y con parajes muy especiales, lagos muy profundos y caídas de agua bellísimas, llama mucho la atención el color turquesa de sus aguas. Caminamos cerca de una hora por el parque a lo largo de caminerías construidas de madera sobre el agua a las orillas de los lagos, entre patos, y muchos peces e insectos.
Al reiniciar nuestro camino la lámpara frontal de mi moto se fundió, y tuvimos que parar a cambiarla antes de que anocheciera, no resulto mayor problema pero en esta parte de Croacia las estaciones de servicio no abundan y puedes recorrer mas de 150 km sin ver alguna, por lo que debes planificar los recorridos para evitar algún susto. También fue curioso la cantidad de policías que avistamos en estas carreteras, incluso con radares móviles en muchos de los pueblos que cruzamos.
Retomamos el camino a Zagreb y solo paramos en lo que parecía una exposición de los vehículos utilizados en la guerra con Bosnia muy cerca de Karlovac, aviones Mig-21 destruidos por fuego antiaéreo, y algunos vehículos blindados muy dañados por el fuego. La guerra y todo lo asociado a ella siempre es triste.
Terminamos llegando a Zagreb  como a las ocho y paramos en el centro a tomar un café y buscar hotel. Luego dejamos todo y nos fuimos a comer, espero que mañana nos de tiempo de caminar un poco por la ciudad, que parece pulcra y ordenada, con edificios bastante antiguos.
En general Croacia, Montenegro y Bosnia difieren mucho del estereotipo que su gentilicio tiene en los países mas desarrollados de Europa, las calles están en perfecto estado, son sencillas pero muy bien mantenidas, y así todo lo que veas esta en su sitio, ordenado y limpio, solo te extrañas de la falta de zonas industriales y el carácter completamente rural de su economía, aun así se ven pueblos prósperos, con mucha historia y una herencia impresionante, si logran mantener la paz tendrán un futuro brillante.

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